My Pain Your Thrill

Bloggera como muchos otros, estudiante como la mayoría y soñadora como TODOS. Un blog sobre lo que se me pasa por la cabeza, sobre mi opinión acerca del mundo... No estaría mal que le echaseis un vistazo, quien sabe, igual vosotros opináis lo mismo.

sábado, 3 de diciembre de 2011

¿Qué tiene de bueno la diferencia?



Cuando estamos en un grupo de amigos en los que todos provenimos del mismo país y tenemos la misma cultura, nos sentimos a gusto y acogidos, pero ¿sentimos lo mismo cuando estamos con gente de distinta cultura, raza, religión, país…? A veces nos sentimos incómodos al estar con ellos, sentimos un metafórico muro el cual nos separa pero, cuando de verdad interactuamos, este muro desaparece, y empezamos a ver más allá de las diferencias físicas. Nos empezamos a dar cuenta que psíquicamente sienten lo mismo que nosotros, quizás no tengan iguales opiniones sobre algunos temas pero si padecen las mismas emociones. Gracias a esto podemos hablar con gente de otras culturas y así acercarnos más a ellos. A menudo no sentimos prejuicios raciales a hablar con ellos, tan solo tenemos miedo a que nuestra opinión los ofenda, por esto es bueno conversar para que nos podamos entender ya que en el fondo todos sentimos los mismo.
En ocasiones vemos a una persona de otro color o con rasgos o vestimentas no comunes en nuestra sociedad e inmediatamente lo calificamos como inmigrante sin tener en cuenta que quizás solo sea un extranjero. Esto ocurre porque muchas veces no sabemos cuál es la diferencia entre estos dos términos. Las diferencias son abismales, pero quizás no haya que fijarse en si es inmigrante o extranjero, lo mejor sería en que solo nos fijáramos en lo que vemos, no detalladamente si no generalmente, ¿Qué vemos? Pues vemos a una persona con derechos, libertades, posiblemente con las mismas esperanzas e ilusiones que nosotros, eso es lo que realmente deberíamos ver.
Muy pocas veces nos damos cuenta de lo que se siente al ser distinto, pero no hace falta marginar o insultar para discriminar a una persona. Me gustaría ponerme como ejemplo. Mi familia es de religión católica, y yo siempre lo he sido, este año, en el instituto me apunte a clase de religión, en mi clase solo estoy yo con otro alumno, este, por motivo de que sus compañeros lo insultaban por ir a esta materia no acude a clase y suspende esta asignatura, yo por mi parte si voy, pero a veces por miembros de mi clase me siento discriminada por acudir, ellos quizás hacen los comentarios graciosos sin el fin de ofender, pero lo hacen.
En esos momentos en los que yo me convierto en el “otro”, siento lo que sentiría un extranjero o inmigrante al llegar a un país o lo que siente una persona de una religión en un sitio de ateos. En otros momentos me doy cuenta que el ser diferente me hace especial, me hace única, y esto hace que en mi clase haya más enriquecimiento social y variedad de opiniones.
Me gustaría mencionar una historia muy curiosa que posiblemente poca gente sepa, yo por mi parte hace unos días que la escuche y me quede asombrada porque esta chica, ahora mujer, de la que voy a hablar no aparece en libros de historia ni nadie ya la recuerda.
Hace 50 años, en EEUU la segregación racial era uno de los problemas más importantes que había, muchos estados lo tenían como ilegal y otros todavía seguían con sus prejuicios. Sobre esos tiempos, una chica de 6 años de raza afroamericana, impulsada por sus padres decidió acudir a una escuela privada que en aquella época era solo para “niños blancos”. Tuvo que acudir escoltada por el FIB, no la dejaban a penas llegar a la escuela.
Ruby Bridges se convirtió en la primera niña en ir a una escuela de este tipo en el sur de Estados Unidos ¿os suena el nombre? No creo, al contrario que Anna Frank su historia hoy en día no es famosa, pero a mí me parece muy interesante ya que ella se tuvo que enfrentar a una gran cantidad de personas que sin conocerla la juzgaban solo por el motivos de que su melanosoma era más densa (causa que provoca el color más oscuro de la piel) nadie sabía realmente como era pero la calificaban de delincuente, hija del diablo…hasta amenazaban con matarla. Una inocente niña de solo 6 años no podría tener nada de malo pero esto no lo sabían porque solo se fijaban en el color de su piel.
Gracias a que ahora esto ya no ocurre pero con esta mini-biografía quería reflejar los prejuicios que tiene una sociedad. No sabemos ver más allá de lo que nuestros ojos nos permiten, y esto es uno de los rasgos más negativos que el ser humano tiene.
Como bien mencione esta historia a penas se conoce, la culpa fundamentalmente la tienen los medios de comunicación. Todos hemos entendido que no somos iguales pero tenemos los mismos derechos y lo hemos entendido porque en clase hemos tenido a alguien para hacernos ver esto, otras personas mientras estudiaban no han podido recibir esta enseñanza y yo creo que si los medios de comunicación se involucraran mas en defender la igualdad podríamos cambiar nuestra manera de pensar un poco más.
Ser diferente es muy bueno, gracias a ello existe la diversidad y lo que no podemos a hacer es sancionar a la gente por ser diferente. Todos somos diferentes, de una manera o de otra pero lo somos.

"Mi mamá me dijo que no puedo
jugar contigo porque eres una negra".
 Con eso entendí todo.
Era por el color de mi piel.”

Ruby Bridges a los 7 años se dio
 cuenta de los prejuicios de una
 sociedad hacia ella solo por su color.

viernes, 18 de noviembre de 2011

¿En qué consiste la igualdad?


A veces creemos que somos diferentes a los de otras culturas, pero en realidad tenemos más semejanzas con ellos que diferencias, ellos podrán ser de distinto color, tener una distinta cultura o comer distintas comidas a nosotros, pero al igual que todos, tienen sentimientos.
Todos sentimos las mismas emociones, y esto es precisamente lo que nos hace iguales. Ese dolor que sentimos cuando vemos a los afectados en los terremotos o esa emoción que concebimos al ver al príncipe de otro país casarse, esos sentimientos es lo que nos asimila a todos.
La mayoría sentimos lo mismo cuando ocurre un acontecimiento, todos lloramos con una muerte o reímos con una noticia alegre. Todos nos preocupamos, nos enfadamos y nos enamoramos… Así que en general, todos somos iguales. No iguales de color, de cultura, de hábitos, ropa, comida… si no de sentimientos, de derechos, de igualdades, de libertades…
Al observarnos nos daremos cuenta de que lo que nos hace diferente, nos hace iguales y nos une. No somos robots, somos personas, somos diferentes, pero a la vez iguales, somos diferentes por fuera, pero iguales por dentro y estas diferencias nos hacen especiales y maravillosos a todos. No podemos juzgar un libro por su portada al igual que no podemos juzgar a una persona por su apariencia si no por lo que de verdad siente y padece.
Algo muy importante para juzgar o valorar si esa persona es igual a mi o no, es conocerla. Por eso debemos dar una cierta importancia al conocimiento de la cultura, empezando por la nuestra propia, porque por más que sepamos como son ellos si no sabes de verdad nuestras raíces o nuestras costumbres no podremos compararnos a ellos.
Una de las maneras de ser iguales es con respeto y tolerancia porque “Sin tolerancia no hay respeto, y sin respeto no hay igualdad”. Por mucho más que memoricemos que somos iguales si no tenemos respeto a los demás no conseguiremos alcanzar esta igualdad, debemos respetarnos mutuamente para así poder ser de verdad todos iguales emocionalmente.
En mi opinión la igualdad no consiste en que yo este feliz viviendo con mis lujos y a la vez mientras veo la televisión preocupándome por los que están sufriendo en otros países; consiste en que todos compartamos los mismos “lujos” y los mismos sentimientos. La igualdad consiste en la solidaridad entre todos, en que de igual cual sea nuestra religión o nuestra opinión política, que todos nos consideremos iguales. Por mala suerte es mi opinión y no la de todos.
La mayoría cree que con preocuparse cuando ve las desgracias sucedidas o de vez en cuando colaborar con ellos ya somos iguales, pero luego cuando estas personas están en nuestro país o en nuestra ciudad las desprecian tachándolos de indeseables e inmigrantes, si todos somos libres e iguales, todos tenemos derecho a viajar, y a la vez  a dejarlos crear una vida.
Ser libre e igual no quiere decir que en un país un hombre pueda hacer lo que le venga en gana pero si su mujer lo haga la califiquen desagradablemente, y a causa de esto ella sea lapidada en algunas ocasiones sin ningún motivo. Ser libre no es que un gobierno mate a un hombre sin ser juzgado solo por el hecho de sus enormes errores en el pasado, ¿a caso aquí se le está juzgando como a los demás? Obviamente la respuesta es no, se le está juzgando como a alguien sin derechos, sin libertades, sin igualdad.
Ser libre e igual es poder disfrutar de un mundo en el cual nuestros derechos sean considerados por la sociedad, una sociedad sin prejuicios. Ojala algún día todos seamos considerados iguales.


 “El único Estado estable es aquel
en que todos los ciudadanos
 son iguales ante la ley.”
Aristóteles

 “Todos los hombres
nacen iguales, pero es la
 última vez que lo son.”
Abraham Lincoln

lunes, 31 de octubre de 2011

¿Cómo vemos a los otros?



Para juzgar a una persona es necesario conocerla previamente. Pero no siempre juzgamos de esta manera. Cuando vemos a una persona lo primero en lo que nos fijamos en sus rasgos físicos, y de ahí determinamos su geografía y su clase social.
Si esta persona nos resulta cercana los prejuicios hacia ella son menores o nulos, pero si la persona es distante a nuestra cultura más prejuicios tenemos sobre ella.
Cuando vemos una foto y en ella aparece una persona de otro color o raza pensamos inmediatamente que es un inmigrante sin tener en cuenta que quizás esa foto fue tomada en su país de origen.
También tendemos a calificar y clasificar a las personas de otras razas, por ejemplo el hecho de los pies de foto de un periódico, podemos encontrarnos unas fotos de personas de otras raza realizando algo normal para su cultura en su país, pues aquí lo que hacemos es manipular ese título y hacer ver a las personas lo que queremos. De esta misma forma también los calificamos y los etiquetamos según su religión, raza, cultura o color.
Normalmente los prejuicios vienen dados por la falta de cultura que deberíamos tener sobre el resto del mundo. Si supiéramos más de otras personas las veríamos de la misma manera que se ven ellos a si mismos. Así que hasta que no consigamos este nivel de cultura y dejemos de ser unos ignorantes seguiremos viviendo en un mundo donde por ser de otro color y pasear tranquilamente por tu país te etiqueten de terrorista o vándalo.

"Nada en el mundo es más peligroso
que la ignorancia sincera y
 la estupidez concienzuda."
Martin Luther King 

sábado, 29 de octubre de 2011

<< ¿Tenemos raíces los seres humanos? ¿Existen las patrias? >>



Todos compartimos unos mismos orígenes, estos se encuentran en África. Como Spencer Wells decía “Todos descendemos de un solo africano”

Hace millones de años el ser humano se tuvo que mover de África a Oriente medio y luego a Asia, esta necesidad de movimiento se debía a causa de las necesidades ambientales para vivir. El Homo Sapiens se podía adaptar a los cambios del clima lo que provoco que la expansión fuera favorable, de esta manera los últimos territorios en ser alcanzados fueron Australia y América.

¿Qué opinamos sobre nuestros orígenes antropológicos?
Si todos procedemos del mismo lugar, todos somos iguales, bueno, diferentes pero iguales en derechos, da igual nuestra raza o cultura, todos somos seres sociales y vivimos en comunidad.

Entonces… ¿Por qué nace el racismo?
El racismo no tiene ninguna base ya que no hay ningún motivo, antes se hacían en EEUU unos exámenes que permitían el reconocimiento de la raza negra como inferior, actualmente estos ya no son validos, así que se puede decir que el racismo proviene a causa de que hace tiempo el poder lo tenían los blancos, pero ahora ya no deberían existir las diferencias.

 Me gustaría mencionar en este párrafo a Martin Luther King, uno de los pocos hombres negros estadounidenses que en los años sesenta se atrevió a mostrar a la nación americana como todos somos iguales y como él dijo: «Las personas se odian porque se temen; se temen porque no se conocen; no se conocen porque no se saben comunicar; no se saben comunicar porque se hallan separadas.» Si nos conociésemos no existiría el racismo, todos somos parecidos, todos sentimos los mismo, no hay bases para fomentar la separación entre razas y me gustaría que todos pensaran esto, pero ni M. L. King ni nadie podrá cambiar la opinión de todos, cada uno ha nacido en su propia comunidad y en esa comunidad ha sido enseñado a amar, odiar y discriminar a cierto tipo de personas, cada uno ha contado a sus descendientes la historia tal y como ha querido, no como de verdad es, la historia contiene muchos de los valores de la humanidad por eso nuestro apellido es importante, porque en él va nuestra historia.

Espero que algún día, todos pensemos parecido respecto a esto  y que nadie sea juzgado por el color de la piel


                                                                      "Tengo un sueño, que mis cuatro hijos pequeños podrán vivir en una
 nación donde no serán juzgados por el
 color de su piel, sino por el valor de su carácter."
Martin Luther King (asesinado el 4 de Abril
De 1968 por un segregacionista blanco)

martes, 25 de octubre de 2011

Sociedad ... ¿Qué es eso?

Creo ser la única persona que se da cuenta de en la mierda de sociedad en la que vivimos. Una sociedad de adultos basada en la perfección y una sociedad juvenil que solo tiene como pilares la fuma compulsiva de sustancias ilegales y el alcoholismo en niveles extremos.
Un lugar donde los derechos del hombre(y la mujer) han quedado a la sombra de los bienes materiales. Donde ya no se respeta las emociones ni los sentimientos. Un mundo sin ideas ni conocimientos.
Eso es lo que hemos hecho, eso es en lo que hemos convertido nuestro planeta... Una sociedad hipócrita...
Donde el terror de uno es el reto de otro.